Si una noche de invierno una lectora.

La grafomotricidad es el proceso previo a la escritura. En esta etapa los niños aprenden a realizar el trazado de las letras, números y formas geométricas. Para ello, los niños siguen unos patrones con los que aprenden como se hace cada grafía. Este proceso ha de iniciarse de forma temprana para que el niño lo vaya automatizando y cuando llegue la hora de escribir le sea mucho más sencillo aprender.  Una vez el proceso de la grafomotricidad se ha adquirido, los niños comienzan a escribir. Es importante comentar que la lectura y la escritura son dos competencias que están muy ligadas. Si los niños todavía no saben leer, es difícil que escriban con propiedad puesto que no van a ser capaces de interpretar lo que han escrito y será una actividad en vano. Así pues, y como comentábamos en la anterior actividad, se deberá respetar el desarrollo cognitivo de los niños. De esta forma, conseguiremos que las actividades realizadas den sus frutos y tengan un significado en su proceso de aprendizaj

La lectura en las aulas españolas tiene un gran peso. ¿Pero realmente se enseña de la mejor manera posible? Todos conocemos el dicho popular de que la letra con sangre entra, y hasta hace poco tiempo ha sido la manera común de enseñar la lectura en las aulas. A día de hoy, a pesar de existir estudios y nuevas metodologías que favorecen la enseñanza de la lectura en los niños, basándose sobretodo en el desarrollo cognitivo del niño, queda mucho por avanzar. En mi experiencia en el colegio de prácticas, fui completamente consciente de ello, y es que, a pesar de lo que se conoce, se hacía leer a los niños desde primero de primaria. Para muchos niños la lectura se convertía en un suplicio del que intentaban escaparse continuamente. Había niños, que intentaban irse al baño cuando les tocaba leer para así no tener que hacerlo. Otros tenían un pequeño refuerzo todos los días donde tenían que leer conmigo algunas palabras y frases cortas. Creo que España es un país que aborrece la lectura por